05 diciembre 2009

En qué mundo vivimos



Indignada.

A veces pienso que la mitad del tiempo de mi vida lo paso indignada, y no es que no sea feliz, porque lo soy, y mucho, lo que ocurre es que no puedo evitar pensar constantemente en cosas que en muchas ocasiones son cercanas a mí, y en otras ocasiones aunque estén lejos las siento retumbar en mi cerebro.

Hace ya algún tiempo, oí hablar de Theo Van Gogh. Este hombre era el bisnieto de del hermano del famoso artista Vicent Van Gogh. Theo Van Gogh,
cineasta, realizó un corto en 2004 llamado “Submission” , que trata sobre la situación de la mujer en el mundo islámico. El guión es de la política Ayaan Hirsi Alí, una somalí que se considera exmusulmana.
El corto es realmente bueno, merece ser visto sin lugar a dudas.

A Van Gogh, le asesinó a tiros un musulmán, dejándole supuestamente clavada también una carta con una amenaza a Ayaan Hirsi Ali, de similares características a la muerte que le había dado al cineasta.


Ayaan Hirsi Ali, es considerada una fuerte crítica del Islam, y vive protegida y escondida a causa de las amenazas de muerte que ha recibido por sus críticas contra esta religión, y sobre todo contra la posición de la mujer en ella. ¿Qué hace mal? ¿Ejercer su derecho a la libertad de expresión? ¿Haber renunciado a la religión musulmana? ¿Atreverse a decir la verdad? ¿Ser mujer?

Y es que además, esta mujer lo ha vivido en su propia piel. Lleva en su cuerpo una marca imborrable de esta religión: la ablación. Escapó de una vida vacía de color y de sueños cuando iba a encontrarse con el hombre con el que su familia le había concertado un matrimonio. Hay muchas Ayaan. Miles de niñas mueren a causa de la ablación, o durante o después de ella.
La ablación consiste en extirpar a las mujeres el clítoris y los labios menores.
Y aun hay gente que tiene duda de si es cultura o no.



Qué humillación tan imperdonable.

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